Proyecto para un playón de estacionamiento como lugar de transferencia hacia el centro de la ciudad

 El estacionamiento en el centro de Bariloche y adyacencias está colapsado. Existen aproximadamente en la ciudad unos 110.000 vehículos, más los de la región y los que arriban como turistas. Los conductores que deseen estacionar en la zona rentada ‘dan vueltas y vueltas por el micro-centro’ y tardan en conseguir un lugar. Se pretende bajar la problemática con un playón para aparcar en la avenida Esandi, como lugar de transferencia.

El director de Tránsito de la Municipalidad, Carlos Catini, informó que “la mayoría de los autos que estacionan en los lugares permitidos son de empleados de distintas dependencias, comerciantes, etcétera”. Propone el funcionario, quien es especialista en el tema, crear una playa de estacionamiento en cercanías de la calle Esandi, como un lugar de transferencia donde los propietarios de automóviles dejen sus vehículos y de allí, en un micro-omnibus que sería gratuito, se dirijan hacia la zona de sus tareas habituales.

Es menester conocer que un transporte público eficiente y la movilidad activa redunda en un uso del espacio más equitativo y sostenible. A partir de la problemática actual Catini tiene en mente un proyecto para la construcción de un gran espacio que albergue vehículos bajo la forma de estacionamiento medido, sobre espacios que estarían disponibles en la zona de la avenida Esandi.

El funcionario refirió que “este proyecto busca ofrecer una alternativa de estacionamiento para los trabajadores que hoy ocupan el microcentro. Toda la gente que menciono, ese 85% de vehículos que estacionan en el microcentro que vienen a trabajar van a poder estacionar en ese lugar y se haría el traslado hacia el microcentro en colectivos que serían gratuitos" y agregó que “la empresa Mi Bus ya se ofreció a brindar el servicio de traslado sin costo adicional para los usuarios ni para el municipio”.

El proyecto ocuparía una manzana o dos donde se construiría un playón con personal de las cooperativas que cuidarán los vehículos. “Hoy los lugares disponibles son de 2500/2600 para el estacionamiento de 8 y hasta las 20 y están por lo general ocupados. Los vehículos siempre son los mismos, no hay rotación. Los titulares son empleados municipales, concejales, personal de las oficinas de Turismo, Parques Nacionales, AFIP, bancos, Tribunales, todo está en el microcentro y son todos trabajadores que vienen a laburar y la gran mayoría de vehículos traen una sola persona”.

Sin duda hay una necesidad de descomprimir el microcentro y no sólo por el Tránsito, también por la polución ambiental. Los micros que saldrían de la playa a construir tendrían un recorrido por Esandi, Diagonal Capraro, Moreno, San Martín dobla en el monolito y regresa por Costanera y Vicealmirante O’connor, quedaría cerca el Poder Judicial, las oficinas de la CEB a pocos metros, igual que la sede de la AFIP y toda la actividad comercial. Bancos, empleados municipales. “También hay que corregir la carga y descarga de mercadería”, dijo Catini.

Hoy la normativa que rige el tránsito en Bariloche tiene 20 años y hay que modernizarla. Para el interesante proyecto se deben conseguir las tierras y se podrían hacer por medio de plusvalía, ya que en el lugar existen importantes inversiones de privados que se quieren llevar a cabo.

Las cooperativas que tienen a su cargo el control y la recaudación del estacionamiento medido seguirán recaudando, los colectivos que vayan desde el playón al centro serían gratuitos, de cualquier manera se debe tener un buen control de las áreas de estacionamiento medido. Si la playa es gratuita se tendrá que abonar el colectivo. Se operaría bajo el concepto de estadía con un valor accesible.

(*) Plan Conceptual del 2021

La puja por el espacio público se observa en las necesidades de espacio requerido por las actividades y los distintos sistemas de movilidad. El uso del automóvil particular redunda en una alta demanda de espacio para la circulación. La red vial ocupa una gran cantidad del espacio público, beneficiando el uso del vehículo particular sobre los otros modos de transporte. Esto redunda en un uso recurrente de la vialidad por parte de peatones y ciclistas (por la deficiencia en las veredas o falta de ciclovías); ocupación de veredas como estacionamiento comercial; ocupación de veredas por vehículos de frentistas; inexistencia de carriles exclusivos de ciclovías y bicisendas; velocidades de circulación incompatibles con la peatonalidad y una carga y descarga relacionada con la logística urbana desordenada.

En consecuencia, el sistema de movilidad concentra sus viajes hacia el área central, con un sistema de transporte público mono-céntrico y una gran cantidad de automóviles que acceden al área central debido a la gran concentración de actividades (bancos, equipamientos, dependencias municipales, comercios, agencias de turismo, comercios, etcétera).

El crecimiento de la ciudad con baja densidad, sin una planificación integrada, tiene como efecto la fragmentación y dispersión con territorios inconexos entre sí por un lado, y una concentración de usos y actividades en el área central por el otro. A su vez, el empleo de vehículos particulares para superar estas distancias y responder a ciertas demandas de movilidad para acceder a dichas actividades, trae como consecuencia la presencia de congestionamiento vehicular en el área central.

La marcada presencia de automóviles en el área centro recae en la demanda de los usuarios por mayor cantidad de espacios para estacionamiento. En cuanto al estacionamiento medido existe una zona tarifada que, linealmente sin considerar espacios reservados. En el 2021 el espacio regulado era de 13,8 km y corresponde a 2454 lugares para dejar el vehículo estacionado.

En la actualidad las demandas por más plazas de estacionamiento se resuelven siguiendo esquemas de gestión poco claros, sin existencia de esbozos de planificación que contemplen la ampliación de tarifas de acuerdo con zonas, ni estrategias de crecimiento.

El estudio sostiene que el principal problema corresponde al estacionamiento en vía pública desordenado y caótico que genera congestión de vialidades restringiendo fluidez y saturación de los espacios disponibles en zonas pequeñas.

El uso del automotor para movilidad personal complica. La circulación de búsqueda de estacionamiento genera congestión; esquemas de gestión no planificada de estacionamiento; incongruencia planificación urbanística por demanda de estacionamiento privados; carga y descarga logística de servicios poco controlada; intervenciones de ordenamiento parciales y localizadas (pe. calle Mitre); controles y fiscalizaciones concentrados en pocos puntos; señalética inexistente para el ordenamiento de estacionamientos; demarcación inexistente en la vialidad de cajones de estacionamiento permitido (uso general, de carga y descarga, detención de auto-transporte colectivo, detención de servicios de oferta libre, etcétera) y desconocimiento aplicativo por parte de turistas para estacionar.

Asimismo en el desarrollo del documento se menciona que el centro es una de las áreas que más sufre los impactos de las diversas demandas de uso por parte de la población local y del gran volumen de visitantes que trae el turismo en un perímetro reducido, con condicionantes de todo tipo, que requiere acciones asertivas y estratégicas que articulen las propuestas existentes en las dimensiones técnicas y de gestión para que el municipio consiga llevar a cabo las transformaciones necesarias. Con rotación vehicular, aumento escalonado de costo del estacionamiento medido según rangos de tiempo de uso.

(*) Plan Estratégico Integral de Desarrollo (PEID) de 2015, la Agenda Urbano Ambiental Bariloche2030, el Plan de Desarrollo Urbano Ambiental (PDUA) Centro-Sur en curso y el Plan Local de Acción frente al Cambio Climático de 2020. IDB.