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La UTA anunció un paro de 48 horas para todo el interior del país
Este jueves se realizó una nueva reunión conciliatoria entre la Unión Tranviarios Automotor (UTA) y la Federación Argentina de Transportadores por Automotor de Pasajeros (FATAP), sin que se alcanzara un acuerdo sobre el aumento salarial solicitado por los trabajadores del transporte.
Ante la falta de una propuesta concreta, desde UTA anunciaron un paro de actividades que afectará el transporte urbano, interurbano y rural en las jurisdicciones donde no se hayan acordado salarios, con cese de actividades previsto para el jueves 22 y viernes 23 de agosto.
Desde la delegación local de UTA, confirmaron que esta medida afectará los servicios brindados por la empresa Mi Bus. No obstante, aún queda una última oportunidad para evitar la paralización, ya que se ha convocado a una nueva reunión para el 21 de agosto, a las 11:00 horas, donde se espera que las partes puedan acercar posiciones y explorar alternativas de consenso.
En la reunión del jueves, FATAP informó que, a pesar de las gestiones realizadas, las condiciones económicas del sector siguen siendo desfavorables, lo que prácticamente imposibilita mantener la ecuación económica de las empresas afiliadas.
La federación aduce que una "combinación nefasta" de tarifas inadecuadas, insuficientes asistencias por parte de los estados nacionales, provinciales y municipales, y el constante aumento en los costos de operación, sumado a la caída en la carga de pasajeros, ha llevado al sector a una situación crítica.
Desde FATAP expresaron que "no se encuentran en condiciones de avanzar en propuestas que obliguen a sus afiliadas con un mínimo de sustentabilidad que garantice el cumplimiento de lo que se pacte".
Además, advirtieron que la paralización de los servicios no hará más que profundizar la crisis del sector, solicitando la convocatoria de una audiencia ampliada que incluya a autoridades provinciales, municipales y COFETRA, con el fin de definir acciones concretas e inmediatas para preservar la continuidad de las empresas y los puestos de trabajo.
Por su parte, desde UTA señalaron que en la mayoría de las jurisdicciones se han alcanzado acuerdos, pero existe una minoría de provincias y municipios que, bajo el argumento de la negativa a incrementar tarifas o la baja en la carga de pasajeros, intentan que el desfasaje económico sea corregido a través de la pérdida de salarios o derechos de los trabajadores.