Gacetilla de prensa

5 buenas recomendaciones para alquilar una propiedad que heredamos

Muchas personas sueñan, en algún momento, recibir una herencia que les cambie la vida. Si bien no es usual que suceda de manera radical e inesperada, sí es muy posible que seamos herederos, por ejemplo, de una propiedad.
El problema es que encontrarnos siendo dueños de un inmueble que antes no estaba en nuestro horizonte puede ser complejo. No por la propiedad en sí, sino por la gestión que podemos hacer de ella si no pensamos usarla para vivir. ¿Qué pasa si pensamos en alquilarla?
En los cinco puntos que siguen a continuación, repasamos algunas buenas recomendaciones que podemos tener en cuenta para alquilar una propiedad que heredamos.

1. Hacerla tasar
Lo primero que es recomendable hacer es contratar a alguien para tase la propiedad y así podamos saber el valor de mercado que tiene. Con esta información, será posible pensar en el valor del inmueble y luego contratar un seguro de caución acorde.
Esto es muy importante para saber qué es lo que estamos poniendo de oferta en el mercado. Si disponemos de los medios para hacerlo, una buena idea es hacer la tasación con, por lo menos, dos profesionales para tener una mejor idea del valor real.

2. Planear arreglos necesarios
Antes de poner nuestra propiedad heredada en alquiler, una buena idea es planear y proyectar las mínimas refacciones o reparaciones necesarias. Esto servirá para aumentar el valor de tasación y poder ganar más dinero con el alquiler.
Además, es una forma de evitar problemas en el futuro con inquilinos que puedan quejarse del estado del inmueble. Con algunos arreglos iniciales, antes de la puesta en alquiler, nos aseguramos que nuestra propiedad está a punto.

3. Aumentar la seguridad con una alarma
Es muy probable que, cuando heredamos la propiedad, ya cuente con algún tipo de sistema de alarmas. Pero, caso contrario, una gran idea es contratar un servicio de vigilancia para aumentar la seguridad de la propiedad.
Contar con una alarma es una gran ayuda para los momentos en que la propiedad está desocupada, algo a lo que los posibles delincuentes estarán atentos. Es fundamental cuidar la propiedad para mantener su valor.

4. Trabajar independientemente o con inmobiliaria
Una buena recomendación tiene que ver con tomar una decisión al respecto de cómo será la gestión del alquiler de nuestra propiedad. Las dos opciones principales son hacerlo de forma independiente o contratar una inmobiliaria.
Esta decisión depende de la experiencia y las ganas que tengamos. Ya que manejar uno mismo la propiedad requiere de un esfuerzo y conocimientos extras. Al mismo tiempo, contratar una inmobiliaria tiene un costo que puede ser significativo.

5. Contar con profesionales de confianza
Finalmente, la última recomendación para alquilar una propiedad es contar con un grupo de profesionales de confianza para las tareas que pueda necesitar la casa. Es importante tener el contacto de gasistas, plomeros y electricistas matriculados.
Así, nos aseguraremos la calidad del trabajo involucrado en cada arreglo que sea necesario. Lo que nos brindará confianza, tanto a nosotros como a los eventuales inquilinos. Además, es una forma de asegurar el cuidado del inmueble.