La principal especie en extinción es el ser humano

La principal especie en extinción es el ser humano

El empobrecimiento de la biodiversidad constituye uno de los aspectos más preocupantes de la crisis ecológica mundial. Entre 50 y 300 especies se extinguen cada día, pero la principal especie en peligro es el propio ser humano.

El mapa productivo agrario del país cambia vertiginosamente. El océano de soja rompió todas las fronteras productivas agrarias desmontando todos los obstáculos que se le presentaron. Miles de hectáreas de bosque cayeron bajo los golpes de furca de la sojización. Los ciclos agrarios quedaron subordinados a la homogenización de lo mismo, de lo igual, de la monoproducción sojera.

Millones de litros de agroquímicos, altamente contaminantes- como el Glifosato- se arrojaron sobre las tierras fértiles, sobre los cursos de agua; se quebrantó la Salud de los Ecosistemas. Solamente en la campaña agraria 2007/8, derramaron sobre la piel de la tierra y con el salón objetivo de aumentar sus inmensas ganancias, 170 millones de litros de Glisfosato.

Los estudios realizados por el Dr. Andrés Carrasco, investigador de la UBA y del CONICET dan cuenta que e l glifosato interfiere en el mecanismo de reparación fisiológico del DNA, lo que podrán conducir a la acumulación de mutaciones en algunos tipos celulares aumentando el riesgo de procesos de malignización celular. Además comprobaron la disminución del largo del embrión, alteraciones que sugieren defectos en la formación del eje embrionario; alteración del tamaño de la zona cefálica con compromiso en la formación del cerebro y reducción de ojos y alteraciones de los arcos branquiales; el tubo intestino con alteraciones en su rotación y tamaño además de posibles alteraciones en la región cardiogénica.
Estas calamidades están pasando al lado nuestro, le ocurren a nuestros vecinos que trabajan en la zona rural y a sus hijos. Si entendemos que la especie en peligro somos nosotros mismos, entenderemos la necesidad de la efectiva protección de la biodiversidad y quizás en esa prevención se sustente gran parte del mejoramiento de las posibilidades futuras del país y de la humanidad.
Ing. Agr. Juan C. Poblet
Especialista en Educación en Ambiente para el Desarrollo Sustentable

Red de Educadores Ambientales de la Argentina

Fuente: www.cnsaladillo.com.ar



LEY DE BOSQUES NO ATIENDE EL DESMONTE EN RIO NEGRO

En los últimos seis años, la destrucción de bosques originarios en el país, pasó de unas 36.000 a 70.000 hectáreas.
En la Argentina se puso en vigencia la Ley Nacional de Presupuestos Mínimos de los Bosques Nativos y en su estreno, no tiene en cuenta a especies autóctonas como chañares o jarillas que cubren la vasta geografía rionegrina.
La norma (Nº 26.331) en su art. 14 que “no podrán autorizarse desmontes de bosques nativos clasificados en una serie de categorías”, lícitamente se incluye a una importante franja provincial ubicadas en las zonas Este y del centro.
Cuando la Ley fue reglamentada, desde la gobernación rionegrina se encontraron con una dato clave, sólo contempla el resguardo para especies grandes consideradas técnicamente con "porte arbóreo".

Si bien la zona Andina queda bajo un paraguas, el articulado oficial interpreta que los piquillines, chañares y jarillas se ramifican a nivel de suelo, y en consecuencia entran en la categoría de arbustos.

El panorama de los campos de secano se presenta como desolador a raíz de los cortes y la sequía que los azota. Los primeros síntomas es la voladura que hay y que cada vez los diluvios son menores.

"El corrimiento de la frontera agropecuaria para implantar soja en la Pampa Húmeda provocó que haya mucha carga animal en los últimos años, por lo cual venimos notando el efecto del desmonte principalmente para producción ganadera e implantación de cultivos destinados a la alimentación bovina", manifestaron el titular del organismo provincial, Ernesto Guidi, y los técnicos forestales Roberto Lini y Juan Carlos Baffoni

Sergio Giachino



POLICIA FEDERAL CONSIDERA QUE LA MINERIA A CIELO ABIERTO CONTAMINA

DEBATE EN ESQUEL
Especialistas de esa fuerza se sumaron a las denuncias que organizaciones sociales viene realizando en cuanto al daño que causan las explotaciones mineras. “Habría otras maneras de extraer el mineral sin contaminar pero no es el caso de la minería con cianuro”, sostuvo una especialista de la policía.
Tal como lo vienen denunciando desde hace tiempo diferentes organizaciones sociales, fueron los propios integrantes de la Policía Federal los que ratificaron el planteo de los ambientalistas: ‘la minería a cielo abierto contamina y genera un grave daño al medio ambiente’.

En declaraciones al diario El Chubut, Mónica Parra, integrante del departamento que lucha contra el Delito Ambiental de la Subdelegación Esquel de Policía Federal no dudó en confiar la afectación al medio ambiente que en general arrojan estos emprendimientos mineros.

“Podemos hablar de lo que es la estadística a nivel mundial y lamentablemente la minería a cielo abierto en la gran cantidad de países que se ha usado termina contaminado”, dijo Parra, quien aclaró que “habría otras maneras de extraer el mineral sin contaminar pero no es el caso de la minería con cianuro”.
Para la especialista, la minería con cianuro “es peligrosa y habría que tratarla con sumo cuidado ya que siempre hay accidentes eventuales que pueden suceder”. “En nuestro país, cada vez que hemos tenido una denuncia la policía ha tomado muestras y ha elevado las mismas al juzgado federal”, agregó Parra en el marco de la primera Jornada Sobre el Delito Ambiental que se desarrolló en Esquel.



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