ESCALAR EN CUBA por Sebastian Carapezza

ESCALAR EN CUBA por Sebastian Carapezza

LA SOLIDARIDAD ENTRE LOS ESCALADORES MUCHAS VECES NO ES NOTICIA Y PASA DESAPERCIBIDA ENTRE EL DEPORTE Y LA AVENTURA.

“A Cuba siempre lo tuve como un viaje soñado. Siempre lo quise conocer, por su historia y por todo lo que Cuba nos cuenta. La idea de ir tuvo que ver con conocer, aprender, ver su historia pero también con escalar mucho. Mi compañera Paula también quería conocer la isla. Ya tenía algo de información por una revista de escalada de Europa que había ojeado, en donde hablaban de Viñales y contaban que había mogotes con caliza, varias vías abiertas y que era muy interesante. Esto fue en el 2008. Ya en el aeropuerto nos hicimos amigos. La solidaridad y lo abierta que es la gente en tenderte una mano es impresionante. Te embriaga de entrada nomás de ver lo linda que son las personas del lugar. Y siendo argentino uno es bienvenido siempre en cualquier lugar, te abren las puertas de los lugares casi sin pedirlo”. Así comienza el relato Leo B.



Viñales queda a alrededor de 200 kilómetros al noroeste de La Habana, dentro del departamento de Pinar del Río. Varios son los que dicen que ahí se encuentran uno de los 6b más lindos del mundo. Leo renueva los mates y continúa con la charla, hablando en primera persona. Por ahí anda León jugando con una pelota y siendo testigo prematuro y privilegiado del viaje a la isla caribeña.



“Cuando fuimos la primera vez teníamos una dirección que nos pasó el “fideo” Molina, quién había estado un año antes escalando, haciendo amigos y abriendo vías principalmente. Así que ni bien llegamos nos conocimos con la peña del lugar. Todos increíble onda y a partir de ahí arreglábamos para ir con alguien a escalar a tal lugar, o nos hacían un croquis para poder llegar por nuestra cuenta. Así escalamos todos los días y por la noche nos juntábamos en la plaza del pueblo a tomar algo y escuchar música, situación que es una rutina casi obligada. Ahí me fui dando cuenta todos los escaladores compartían sus equipos de escalada y dependían de lo que le llevara la gente de afuera. Las vías del lugar eran abiertas muchas veces por ellos, pero dependían de un taladro que muchas veces andaba mal o de que venga un extranjero con equipo. Porque a Viñales van muchos escaladores franceses, canadienses y españoles por una cuestión de difusión de escalada en Cuba en esos países. Así nos encariñamos mucho con los chicos, miramos algunas películas (de Ramiro Calvo) que llevamos desde Bariloche, intercambiamos música y todas esas cosas que suceden con amigos. Así conocimos a Juan Carlos, “El Flaco”, “Ernesto”. Yaerobi (uno de los primeros en escalar un 7 c en Cuba), Josue, Alberto, “los titos”, que son dos mellizos, Adrián, son algunos de los que conocimos en ese lugar que tiene uno de los 6 b y 6 a más lindo del mundo.

Resulta que el día en que nos teníamos que despedir (después de diez días) costó mucho porque sentimos que se había formado un vínculo entre nosotros. Y no lo queríamos soltar. Y desde algún lugar de nuestro corazón les dijimos que íbamos a volver a Viñales. “Sí, así dicen muchos y nunca vuelven.”, me contestaron. Y agregaron: “Como van a volver teniendo todo el mundo para conocer, con todos los lugares que hay.” Cuando nos fuimos dejé parte de mi equipo, (las cuerdas, un par de zapatillas, una placa mosquetones), ya que varios de los chicos de allá no tenían nada propio.

Así es que fueron pasando los años, fuimos a otros viajes, visitamos y escalamos en otros lugares, y nació nuestro hijo (León). Pero en Abril de este año surgió la posibilidad de volver y no dudamos. El contacto quedó desde la primera vez, generalmente vía mails. Queríamos volver y curtir más tiempo con ellos en el lugar. Y si era posible llevar material para dejarles y así seguir desarrollando el deporte en Cuba. Ya sabía de nuevos sectores que se habían abierto, así que antes de ir pregunté que equipos eran los que más necesitaban. Porque allá la roca es caliza y gasta un montón de cuerdas y de zapatillas. Así que cuando me puse a recolectar el equipo hice incapié en eso.

_ ¿Cómo germinó la idea de juntar equipo para llevar a la isla?

_Por un lado “soy bastante cararota”(risas), pero además que eso se que hay un montón de escaladores que se le puedes puede pedir. Y muchas van a poner lo que puedan. Y así fue. Por una cuestión de peso, no podíamos llevar más de 36 kilos por persona. Así que teníamos 70 kilos entre los dos, mas unos kilitos más que nos daban por León (su hijo de un año y medio). Entonces empecé a pensar qué pedir y a quiénes. Primero le fuí contando a amigos que sabían que podían donar algo, también fue muy útil el boca en boca en reuniones entre escaladores donde siempre hubo un “bueno, dale, algo te paso”, del otro lado. Y así fui juntando más. También hice un par de llamados puntuales e hice una nota en el Facebook, donde respondió gente donando más material. Y así fuimos juntamos un montón de cosas. Forman una lista grande los que aportaron, no los quiero mencionar para no olvidarme de ninguno, pero fueron alrededor de 15 personas de diferentes lugares; Mendoza, Córdoba, Bariloche, Capital Federal y Provincia de Buenos Aires y el Chaltén. Al final llegamos al aeropuerto con 130 kilos. Por suerte hicimos una maniobra cuando la pesaron en la balanza del aeropuerto y no tuvimos que pagar exceso de equipaje…(silencio seguido de risas).



_ Así es que cumplieron con su palabra y viajaron por segunda vez a la isla….

_ Sí. La segunda vez fuimos en Abril de este año por lapso de un mes, y donde estuvimos casi todos los días escalando en Viñales. Nos estaban esperando. Ya nos habían conseguido una casa para alojarnos y como siempre nos trataron de maravillas. Mejor no la pudimos haber pasado. Conocimos más gente que antes no estaban y disfrutamos mucho. Yo escalé todos los días. Paula los días que quiso también escaló. A veces íbamos con los chicos y a veces los tres solos. Cuando les entregué las cosas al segundo día, no la podían creer. No sabían que decir. Imaginate que en Viñales hay solo 10 escaladores. También hay un grupito que va a escalar que es de otro pueblo llamado Puerto Esperanza y ovbiamente de la Habana que llegan los fines de semana, Puerto Esperanza es un lugar muy recomendable para visitar. Todos ellos son parte del Club de Escalada en Cuba, algo que les sirve como una figura legal, porque en realidad la escalada en Cuba aún no está considerada un deporte. Para tratar de contribuir a esa causa crearon ese Club. Pensá que un cubano gana alrededor de 15 dólares por mes. Un arnés cuesta 120 dólares. O sea 8 sueldos enteros. Una cuerda le significa 20 sueldos enteritos de su bolsillo. No hay relación ni proporción de precios. Estas cosas que les llevamos quedaron entre ellos y ellos sabrán repartirlo y usarlo. Estoy convencido de que esto va a ser así porque los conozco y se que es lo que hacen. Además no existe una sede donde dejarlos.



A lo cubano

“En ese mes que estuvimos escalamos por distintos sectores, y abrimos vías en un sector nuevo “Vega do pico”, que está a 4 Km del pueblo para lo cual íbamos en bicicleta. Allí hay unas 15 vías abiertas, (de unos 60 metros de largo). También abrimos otra vía que será un 7 a+ /b, que se llama “la mudanza de Bátman” debido a que la vía justo pasa por una cuevita, un moco de piedras secundaria donde habita un murciélago. También dejamos el descuelgue y marcamos tres vías en otra pared del mismo sector que está virgen que ellos quedaron a cargo de equipar. El sector tiene una característica distinta para Cuba. Allá toda la roca es caliza y abundan las vías con desplome y buen canto. Lo que lo hace distinto es que es una caliza que se corta por estratos y tiene un leve desplome. La mayoría de las presas son romas. Entonces hacen una escalada distinta al que estaban acostumbrados. Es una escalada muy entretenida y diferente. A mí me sorprendió la calidad del lugar. También tiene como chorreras secundarias (o mocos, como le dicen en Cuba) que te sirve de presa. Ahí es donde se hizo el último festival de escalada de Cuba, donde hubo extranjeros y cubanos.

Se puede trepar muy poco de abajo para abrir así que hay que ir desde arriba, donde abunda la vegetación. Entonces se tarda en llegar y abrir un poquito el lugar para descolgarte después.

Ahí tuvimos una situación mientras estábamos abriendo las vías. Resulta que vino un Guajiro, (un campesino), y con no muy buena onda, nos pidió que nos vayamos. Nos pusimos a hablar y lo que había pasado unos días antes era que un canadiense, sin preguntar en el pie de vía, macheteó y cortó matas de café, lo cual está muy mal ya que tardan mucho en crecer”. Y no corresponde sacar nada sin preguntar o pedir permiso ¡!1



_Acciones que después perjudican al resto….

_Todos queremos tener acceso a los lugares, pero cuando pasa algo de esto se complica el acceso para todos. Resulta que el Guajiro entendió que nosotros no habíamos cortado la planta de café, quedamos en que eso no iba a volver a suceder y hoy se puede sigue escalando en ese lugar.

Conocer qué plantas poder sacar y qué no es básico, entendiendo que cuanto menos se saca es mejor. Siempre hay una ramita que va a molestar, pero si se puede evitar sacarla, mejor. La vegetación es tan exuberante que a veces salen árboles de las paredes, entonces hay un montón de vegetación que uno tiene que conocer. Creo que hay que interactuar con los locales, interiorizarnos en como y cuando ir, en conocer cuál es la ética del lugar para ir a escalar. Como sucede en todos los lugares del mundo donde uno va a un lugar nuevo; averiguar que se puede hacer y que no, a quién hay que pedirle permiso, que sector está habilitado. Todo eso te lo van a informar siempre los locales y con la mejor onda.



_ ¿Con respecto a los accesos a sitios de escalada, también allá hay problemas con los privados? _Convengamos que en Cuba todo es del Estado. En casi toda la isla hay reservas naturales o provinciales. Pero a veces hay que convenir con el dueño del lugar el paso, o el tránsito sobre sus terrenos. Pero siempre es con la mejor onda. En una casa te venden un juguito, en otra podes tomar un café y charlar con la gente y tirarle una onda. Son agricultores principalmente. La gente que vive en esos lugares “tiene la mejor”. Hay algunos problemas puntuales de acceso cuando involucran a sitios muy turísticos, como la zona de “La playa” o “Cuba Libre”, por ejemplo.



_ Estuviste escalando en muchos lugares de Patagonia, Argentina y América. ¿Ese lugar es semejante a otros que ya conozcas?

_ No, tiene una característica y una identidad propia. El lugar es bien llano, son campos con la tierra color roja y son mogotes que surgen de la nada, con muchas palmeras y diversa vegetación. En total hay alrededor de 300 vías abiertas de todo tipo. Hay vías de hasta 5 largos y las dificultades llegan hasta 8 b. Hay muchos proyectos encaminados.



_ ¿Podes hacer una generalización con respecto a las características de los escaladores cubanos?

_Están muy acostumbrados a escalar en lo que tienen. No tienen muchas vías clásicas ya que tampoco cuentan con demasiado material como para escalarlas. Están acostumbrados a algún canto y al desplome. Pero hay escaladores fuertes. Tienen muchas virtudes. Son grandes escaladores. Creo que si los sacas de ese terreno escalarían muy bien en otros lados también. Tienen una onda muy latina y te brindan todo. Te llevan a conocer todos los lugares que quieras. No hay muchos que manejen los fierros, empotradotes o ganchos. Son un puñado los que abren las vías, mientras los demás escalan vías deportivas. El cubano tiene un espíritu de lucha, de empuje, de superarse y de vivir que contagia y lo trasmite de una forma muy particular. Creo que a nivel mundial serían muy buenos escaladores si el deporte estaría reconocido en ese país, con todo lo avanzado que está Cuba en cuanto a sus políticas de incentivación al deporte y entrenamientos en general.



CUBA LIBRE

Son muchos los que van a Cuba queriendo conocer su historia, lo que implica la revolución y toda su historia social, pero cuando pasan por Viñales se enteran que ahí existe la escalada, que hay roca caliza de buena calidad y más de 300 vías abiertas. Y uno se pregunta como no lo supo antes. “Por eso mi intención es difundir la escalada en Cuba porque es un lugar espectacular donde seguro la va a pasar bien y donde también está bueno tirar una onda; abrir más vías, que se siga desarrollando, para que los pibes sigan escalando, expandiendo el deporte y sintiéndose libres. Porque la escalada se está expandiendo en la isla, pero muy a cuentagotas, por la falta de materiales. Creo que en un futuro se va desarrollar la zona de Holguín. Allí hay caliza que da al mar, ya que estuvo sumergida en él. Entonces encontrás caracolitos y estalactitas por diferentes lugares. A su vez el mar fue haciendo cuevas por distintos lugares. Por ejemplo la “cueva cabeza de vaca” (mirar recuadro) atraviesa todo un mogote donde caminas hasta quedarte sin luz y salís del otro lado. Es una cueva natural que tiene un montón de vías abiertas. Después hay otro sector que se llama “cueva larga”, donde te metes como por una puertita, haces un descenso y tenés dos paredes, una de cada lado, donde una está llena de cristales pegados a la caliza, como si fuera una cuarzita. Del otro lado hay un desplome, un sector de placas y chorreras de dos largos donde salís a un agujero que te trasporta al exterior del mogote. Es muy lindo. Hay formaciones muy locas. También es muy bonito para hacer trekking por el lugar para conocer los otros valles donde hay cuevas que tienen vías dentro y encontrás aguas termales donde se puede nadar.”La cueva del indio”, si bien es comercial es un lugar bonito que tiene ríos subterráneos.



MANOS CARIBEÑAS, ACENTO CUBANO.



La historia dice que la escalada en Cuba surge a través de la espeleología. Esos investigadores de cuevas que recopilan materiales fueron los primeros escaladores. El “flaco” Adrián, uno de los escaladores activos y precursores de la escalada en la isla, rememora esos comienzos mediante un video casero que el mismo Leo B, le grabó en la isla: co “Después empezamos a organizar eventos. La sociedad de espeleólogos nos ayuda en todo. Los escaladores de otros lados se sorprenden pero la sociedad de espeleólogos defiende la escalada sobre todas las cosas. Sin embargo todavía, la escalada no está reconocida dentro del abanico de los deportes en Cuba. La mayor parte de las rocas están dentro de Parques Nacionales, donde en Viñales es el epicentro, la meca de la escalada en Cuba. Las primeras vías que se abrieron fueron escaladores de EEUU y a partir de ahí ese vínculo lo mantienen los extranjero.. Se puede elegir si se quiere escalar con sombra o con sol. Cada tanto vamos a algunos mogotes donde hay mucha vegetación a explorar, pero ya lo hemos recorrido casi en su totalidad.”



_ ¿Cuál es la ética del lugar para el aperturista?



Yaerobis , escalador , aperturista y seguramente uno de los mayores motivadores de la escalada en Cuba , también es el encargado de la pagina web www.escaladaencuba.cu _La gente piensa de muchas formas. Aquí hemos equipado con el único taladro que había y eso es un poco complicado. A mi me gusta que halla una sola línea aunque después en 5 ó 6 metros no halla nada . También delimitar con piedras el límite del sector, porque la base crece y crece y erosiona demasiado el lugar . A veces con 2 metros es suficiente y hay veces en que hay 6 metros, donde se cortó toda la vegetación y eso no esta bueno . Ni hablar de retirar la basura cuando nos vamos. De pedir permiso cuando entramos a la vega o cruzamos el campo del guajiro, no pasar por la tierra trabajada etc.



En cuanto a preferencia a la hora trepar, Yaerobis explica que “a los cubanos no les gusta ir 4 ó 5 días a una pared. Eso es lo que falta aquí. En ese sentido a los espeleólogos no les interesa nada. Si se tienen que ir una o dos semanas se agarran la comida y se van. En la escalada en Cuba falta un poco de expedición. Estamos acostumbrados a tener a la pared muy cerca. Y a veces uno se cansa siempre de las mismas vías. Aunque sea un proyecto de 8b. Personalmente prefiero ir a vías a unos kilómetros de distancia, equipar y quedarme algunos días. Ir a una pared, y a una zona nueva donde todo es nuevo. Sino no tiene gracia. Los escaladores se dividen en los muy deportivos y los expedicionarios. Estos últimos son los que equipan todas las zonas. Sin el expedicionario no habrían más sectores, se extinguirían”



_¿De que depende del desarrollo de la escalada en Cuba?

_Cuando hacemos un evento, o una competición es increíble la cantidad de gente que aparece. Por ahí hay gente que hace 5 años que no escalan, pero van a la competencia. Y eso es lo mejor de todo. Hay que hacer. La gente tiene tremenda alegría cuando hay un evento en roca. Hacemos por lo menos 2 eventos al año. Abrimos una pared como un rock trip y otro que es una competencia nacional. Ya hemos tenido participación extranjera. Para el evento que viene vamos a convocar con 6 meses de anticipación para todo aquel que quiera venir.



----------------------------------------------------------

CONTACTOS
Adrián Pérez “El flaco”
48- 796009

perezadrian@correodecuba.cu
Juan Carlos
48-695348

Yarobys García Martínez
52298692
escaladaencuba@gmail.com

-----------------------------------------------------------

RECOMENDACIONES

_Una cosa para tener en cuenta es que en Viñales no hay lugar de acampe. Solo puede alojarse en casas de familia. Hay un sector al lado de las paredes con alquiler de cabañas que apuntan principalmente a un turismo local. Todos los sectores valen la pena “Guajiro ecológico” “Hawaiiana””la playa “” Cuba Libre” “El camping”. Recuerden que en la isla no se consigue nada en cuanto a material de escalada, y si pueden llevar algo más de lo que use como para dejar va a ser muy bien recibido, y mejor usado.

_Recordar que en algunos meses del año, hace mucho calor. Se escala con shorts, bermudas y remerita nomás. Es algo para tener en cuenta. Cuando la temperatura es muy alta es preferible buscar el momento y lugares adecuados, ya que no estamos acostumbrados a escalar con tanto calor. Por suerte hay lugares a la sombra, y vías dentro de las cuevas, para elegir.

por Sebastian Carapezza
publicado en Revista Koch

Deportes Extremos