Llega desde Brasil la obra que inaugura el Festival Internacional de Titiriteros Andariegos en Bariloche

Llega desde Brasil la obra que inaugura el Festival Internacional de Titiriteros Andariegos en Bariloche

“En la distancia que media entre la nada y el gesto es donde radica el verdadero arte de hacer títeres”


Llega desde Brasil el primer andariego

La obra que inaugura el Festival Internacional de Titiriteros Andariegos en Bariloche es “Una Noche en Vela” del titiritero, escritor y director de teatro de títeres Rafael Curci. Las dos únicas funciones serán el fin de semana 14 y 15 de las 18 hs en el Hotel Nevada rolando 250.

Rafael Curci también es guionista de historietas y ha publicado varios libros como investigador del ser y del quehacer del titiritero. Es uruguayo, vivió en Argentina y actualmente reside en Brasil, se define como un extranjero, que vive con un pie en el avión y el otro en la tierra donde recala.

“Una noche en Vela” es un espectáculo musical de teatro de títeres inspirado en los dibujos animados clásicos y tiene como referencia los cortometrajes de las décadas del ‘30 al ‘50 (Bugs Bunny, Popeye, Tom & Jerry, Tribilín, etc.)
El autor de la obra da algunos detalles. Explica: Una de las características más importantes de los dibujos animados de esa época era la de contar historias prácticamente sin palabras; de esta manera, y con una fuerte preponderancia musical sumada a los efectos de sonido, inducían al personaje a expresarse casi exclusivamente a través de su gestualidad y movimientos. Como todos los personajes de los dibujos animados, el protagonista de esta historia enfrenta una serie de situaciones que perturba su vida cotidiana de manera abrupta. Partiendo de esta sencilla premisa, los conflictos se van desencadenando de manera creciente y entretenida, marcando una tensión en la historia que solo se resuelve hacia el final.
En este caso el titiritero no está vestido de negro ni semioculto entre las sombras, sino que cumple el rol de co-protagonista de la pieza. Su función es la de un mayordomo que asiste a su patrón cuando éste llega de una jornada intensa y agotadora. El rol del patrón es ejecutado por un títere cuyo único propósito es dormir, sólo que a lo largo de la noche se desencadenan una serie de eventos tan inoportunos como inesperados.
“Una noche en Vela” dura 40 minutos y es para chicos (y grandes) desde los 6 años. Se usan títeres de mesa y teatro de sombras. En el marco del festival se podrá ver el sábado 14 y domingo 15 -los dos días a las 18 hs.- en el hotel Nevada, Rolando 250.

Aquí algunos fragmentos de una entrevista realizada a Rafael Curci, distancia mediante, a días que llegue al Festival de Titiriteros Andariegos.

¿Qué expectativas tenés respecto a participar del Festival?
-Escuché hablar bastante de las ediciones anteriores de este festival y por razones de agenda, tiempo y de distancia nunca tuve oportunidad de participar. Ahora pudimos hacer coincidir estos tres factores, así que la expectativa de mi parte es muy alta. Espero que al público de Bariloche le guste nuestra propuesta.

Sos uruguayo, viviste en Argentina y actualmente en Brasil. ¿Notás diferencias, respecto al trabajo con títeres y el cómo se ve a los titiriteros, en estos tres países?
- Hay quienes afirman que hacer teatro en América Latina es poco más que una locura, imaginate entonces qué trastornados debemos estar los titiriteros… Nuestro lenguaje es lo suficientemente rico y diverso como para poder generar propuestas tan simples como hermosas. Esto depende de la idoneidad y la experiencia del titiritero, de su formación, de los medios que dispone, de los objetivos que se plantea día a día y claro, de su profesionalidad. Estos factores son los que definen la cualidad de su trabajo y son tan determinantes en Argentina como en Brasil y Uruguay. Es un oficio hermoso en el que hay que perseverar y sostener sin descanso, pese a que las condiciones laborales para los artistas en general nunca fueron ni serán buenas y mucho menos favorables.

¿Los titiriteros son realmente andariegos, o es un mito? ¿Cómo es en tu caso?
- Soy un extranjero. Siempre lo fui y lo seré hasta mis últimos días. Vivo con un pie en el avión y el otro en la tierra donde recalo. Tanto andar por ahí me otorgaron esa ciudadanía -sin opción- y desnaturalizado a la fuerza. Somos muchos los latinoamericanos que andamos por ahí trotando vidas y haciendo mundo. Deberíamos juntarnos todos y fundar un país, la hermana e inquieta República de Extranjis como yo la llamo y que, lógicamente, no tendría una ubicación específica en los mapas ni fronteras que limiten con nada… Un país al que no tendríamos necesidad de volver y mucho menos de extrañar porque viaja con nosotros, lo llevamos dentro.

¿Cómo definirías el ser titiritero/a?
- Titiritero es cualquier individuo mas allá de sus creencias, raza o color que sea capaz de detonar de manera sistemática ese vacío aparentemente insustancial e inconmensurable que proyecta el títere cuando realiza una acción precisa, comunicadora, significativa, y al mismo tiempo simbólica. Porque es en ese vacío, en ese espacio aparentemente sin sustancia que de golpe se llena de vida, en la distancia que media entre la nada y el gesto, es donde radica el verdadero arte de hacer títeres.

En lo personal ¿dónde estás trabajando, y en qué?
- Actualmente me desenvuelvo como director artístico en distintas compañías de Brasil, México y Argentina. A veces me llaman para dirigir una obra o elaborar una dramaturgia a pedido, otras para dar asesoramiento artístico o coordinar las distintas etapas de montaje y producción. Justamente, una vez terminadas mis presentaciones en el festival de Bariloche, viajo a Neuquén por quince días para integrarme al nuevo proyecto de Jorge Onofri quién me convidó a participar de su nueva obra basada en un texto de María Elena Walsh. En Brasil estoy trabajando en la elaboración de repertorio para la Compañía Fios de Sombra.

Y respecto al elenco ¿Qué planes tienen? (futuros trabajos, presentaciones, otros festivales, etc)
- Nos vamos a presentar en junio en el Festival de Fitafloripa con un espectáculo de sombras que estrenamos a principios de este año, titulado Ángel de Papel. A mediados de julio estamos estrenando Cinza, otro trabajo de títeres pero para adultos. Y para agosto tenemos previsto llevar a escena El Niño de Arena (Ilusiones y Mareas) una obra que monté hace unos años en Argentina y que en Brasil se llamará Maresías.


Breve curriculum de Rafael Curci

Rafael Curci es titiritero, escritor y director de teatro de títeres. Nació en Montevideo (Uruguay) en 1963, aunque desarrolló gran parte de su trabajo profesional en Argentina. Discípulo de Javier Villafañe y Ariel Bufano, integró el Grupo de Titiriteros del Teatro General San Martín desde 1988 al 2005. Colaboró como dramaturgo y director de varios espectáculos de la compañía Omar Álvarez Títeres, entre los que se destacan “El Soldadito de Plomo”, “Ilusiones y Mareas”, “La Niña de los Cerillos” y “El Viento entre las Hojas”, entre otros. Sus muchos y diversos escritos como investigador en la materia fueron publicados en tres libros: “De los objetos y otras manipulaciones titiriteras” (Tridente Libros, Buenos Aires, 2002), “Dialéctica del Titiritero en Escena” (Ediciones Colihue, Buenos Aires, 2007) y “Títeres, objetos y otras metáforas” Ediciones Libros de Godoy, DF, México, 2011. En el año 2005 el Instituto Nacional del Teatro (INAT) publica una antología que reúne un puñado de obras suyas especialmente escritas para distintas técnicas de animación. Sus espectáculos participan en los principales festivales nacionales e internacionales, y ha recibido por los mismos distintos galardones, destacándose el Primer Premio Festival Metropolitano 1999, Festival de Necochea (2000), Teatro del Mundo (2005–2006-2007) ARGENTORES-2005 y Valise Festival- Polonia, 2006, entre otros. Colabora regularmente con artículos y ensayos breves para las revistas Titereando de España, “Puppen, Meschen & Objekte” de Alemania, “Teokikixtli” de México, Palos & Piedras” de Argentina. Como docente, dicta seminarios y talleres de formación profesional en distintas ciudades de América y de Europa. Actualmente se desempeña como director artístico en distintas compañías teatrales de Argentina, Brasil, México y España.

Festival de Titiriteros Andariegos