La polémica sobre Coachella

La polémica sobre Coachella

El festival de música Coachella, que cada mes de abril se celebra en la ciudad de Indio, puede presumir de ser el festival con más famosos por metro cuadrado. Es una cita ya consolidada en pleno desierto de Palm Springs a la que cada año acuden numerosas celebridades e “influencers”, que sorprenden a los asistentes con sus polifacéticos looks. Este año, The Weeknd, Beyoncé y Eminem han sido los cabezas de cartel y entre los espectadores VIP hemos visto a Alessandra Ambrossio, Paris Hilton, Kendall Jenner y Dulceida.
Sin embargo, esta edición no ha sido como las demás. Y es que el festival Coachella se ha celebrado envuelto de polémica. Recientemente se ha publicado que el dueño de este evento, Philip Anschutz, ha realizado importantes donaciones a grupos conservadores y proarmas, entre los que se incluyen organizaciones anti LGTBQ, políticos republicanos en contra del aborto y del matrimonio homosexual, y Super PACs.
La noticia desató las críticas en prensa y redes sociales como Twitter, donde los usuarios criticaron duramente que el dinero de las entradas se destinara a fines de este tipo. Y también ha habido celebrities que han decidido no acudir más a este festival. Es el caso de las modelos británicas Cara Delevigne y Adwoa Aboah. Ambas han hecho público su desacuerdo con el destino de estas donaciones y ya han anunciado que no volverán a asistir al evento.
Por su parte, el festival está intentado lavar su imagen. En cuanto estas polémicas donaciones se dieron a conocer, los asesores de Anschutz iniciaron una campaña mediática para frenar las críticas. De hecho, rápidamente se donó un millón de euros a la Fundación Elton John contra el SIDA y se emitió un comunicado en el que el dueño del festival aseguraba que apoyaba “la libertad de todo el mundo” y afirmaba que no había sido su intención sufragar organizaciones que fueran en contra de los derechos humanos básicos.
La edición 2018 es pasado y ahora ya toca pensar en la siguiente. Quién sabe si a raíz de esta polémica es cierto que Philip Anschutz reflexiona más allá de las palabras y cambia el destino de las donaciones. Seguro que de cara al 2019, los numerosos fans de Coachella no solo están atentos al cartel del festival, sino también al uso que se hace del dinero que se recauda con sus entradas.

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