Fallo beneficia a Mapuche quienes habian recuperado tierras

Fallo beneficia a Mapuche quienes habian recuperado tierras

SAN MARTÍN DE LOS ANDES (ASM).- En un fallo que podría tener consecuencias en el futuro desarrollo de la llamada "bandeja hotelera" del cero Comandante Díaz, la justicia absolvió a familias Mapuche en una causa por "presunta usurpación de tierras" en los lotes 58 y 59, ubicados sobre los faldeos que rodean al casco histórico de la ciudad por el sur.

Por Diario Rio Negro

La decisión judicial asume de hecho que la comunidad Curruhuinca -los ocupantes se habían asentado con el permiso del Lof Mapuche local- es la que se desenvuelve en esas tierras por historia y ancestros. La acción había sido promovida por el municipio, precisamente en resguardo del desarrollo previsto para aquellas tierras. El fallo de juez contravencional Mariano Etcheto beneficia a Fermín Mora, José Tripailaf, Antonio Tripailaf y Segundo Hernández, asentados en viviendas precarias con familias de la comunidad Curruhuinca.

Los lotes en cuestión forman parte de la llamada "bandeja hotelera", que a su vez integran un plan de expansión de servicios de alta calificación, diseñado al comienzo del nuevo milenio pero que aún no se ha puesto en práctica. Allí destaca la estructura del Hotel Sol de los Andes y el Mirador del Centenario, que a su vez conviven con diversas viviendas y barriadas que han tenido un crecimiento improvisado, a su vez avivado por nuevas recuperaciones.

El juez desestima los argumentos de la fiscalía, que había pedido seis meses de prisión condicional por el delito de usurpación, y basa su determinación en el artículo 75 de la Constitución nacional y el 53 de la carta magna provincial, que reconocen la preexistencia de los pueblos originarios y la personería de las comunidades que integran.

Asimismo, se reconoce la propiedad comunitaria de las tierras que ocupan de forma tradicional, las que no son enajenables ni transmisibles y no pueden ser gravadas o embargadas. El semanario local "La Bandurria" publica, en su última edición, un detalle de la sentencia del juez Etcheto. Entre otras consideraciones, el magistrado subraya que las personas sometidas a juicio se limitaron en un sitio tradicionalmente ocupado por la comunidad Curruhuinca, a la que pertenecen, lo cual fue confirmado por varios testigos y autoridades de la comunidad.

A partir de esa comprobación, y sobre la base de lo que manda el texto constitucional y el convenio 169 de la OIT, el magistrado interpreta que no habiendo despojo no puede existir el delito de usurpación, ya que quienes se instalaron en esas tierras contaron con la anuencia de la comunidad.

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