Con la Gente de la Tierra

Con la Gente de la Tierra

Sabíamos de los Mapuche y de las problemáticas que habían tras el Territorio Mapuche (WallMapu), pero no sabíamos el significado real y toda la cosmovisión que encierran tan pocas palabras. "Mapu" significa tierra. "Che" significa gente. Al referirse a Tierra, no se trata de rocas y arenas que pisamos, sinó que va mucho más allá. Es todo el territorio donde viven aves, plantas, árboles, animales de todo tipo, el agua que circula y el aire que cruza montañas. No solo la tierra que se pisa (Nag Mapu) sino también la tierra de arriba (Wenu Mapu) y la tierra de abajo (Minche Mapu). "Che" es la gente, pero la gente que convive, entiende y respeta la "mapu", porque forma parte de ella.

Por M i M-Abyayala.info

Tras éstas palabras también hay una manera de vivir y organizarse mucho más antigua que los estados actuales. Tampoco se limitan a un concepto tan simple como el de "nación". Antiguamente las comunidades vivían de forma autónoma y en pleno equilibrio y armonía con el contexto natural en el que se encontraban. Así, existían las que vivían cerca de los lagos, en las montañas, las que vivían del mar, etc a ambos lados de la cordillera. Cada comunidad a la vez tenía y tiene su identidad de acuerdo al espacio territorial donde se desarrollaba y desarrolla como Mapuche (Identidades Territoriales)... Su unión era una misma cosmovisión que fue con la que se enfrentaron al "winka", el blanco invasor que llegó para destrozar, arrasar y expoliar, quebrando así las leyes básicas de la armonía y el equilibrio natural que conciben las mujeres y los hombres Mapuche. Si bien en un inicio el Pueblo Mapuche no era guerrero, fue uno de los pueblos que ofreció mayor resistencia al invasor y se mantuvo libre hasta bien entrados el siglo XIX, utilizando tácticas de guerra y conocimientos del territorio superiores al potencial "winka".

Hoy en día, el "winka" continúa sin comprender nada de la "Mapu" y la agresión está llegando a límites insostenibles. En lo que fue el WallMapu (Territorio Ancestral Mapuche), hoy es ocupado por el centro-sur del estado actual argentino y desde la Araucanía hasta el sur del actual Chile. Tierras, mares y lagos que sufren la codicia e ignorancia del invasor capitalista que sólo ve en la "mapu" un interés, el económico, expresado en la extracción de gas y petróleo, contaminación de mares y lagos por la producción, apropiación de grandes extensiones de tierra en manos de pocos, minerías, explotación forestal...

Atilio Curiñanco, de la comunidad Mapuche Santa Rosa-Leleque (Chubut) con su familia se enfrenta al gran capital Benetton, lo primero que nos dijo fue " La Mapu está presa" y eso lo hemos podido comprobar a lo largo y ancho del territorio.

Nuestro primer contacto con comunidades Mapuche fue al visitar la comunidad de Kaxipayiñ al norte de Neuquén. Pequeña comunidad de no más de 70 personas que viven de la ganadería, en la actualidad en su zona tienen más de 80 pozos de extracción de gas y petróleo, aparte de una inmensa planta de transformación llamada "Mega", en su mayoría de la multinacional Repsol-YPF. Pudimos hablar con la gente de la comunidad y el "lonko" (orientador) quiénes nos hablaron y nos mostraron los daños y perjuicios que significan esos pozos en la comunidad: tierra perforada y gaseoductos por todos sitios creando una telaraña de metal, fugas continuas que contaminan ríos , pozos y napas de agua, provocando a lxs pobladorxs graves problemas cutáneos, respiratorios, abortos indeseados, niveles de metales pesados en la sangre más altos de los normales... y por no hablar también de la muerte de animales.

Después de haber intentado incluso presentar una demanda formal contra Repsol-YPF en el Tribunal Interamericano de Justicia (instancia a nivel internacional) y no recibir respuesta, se encuentran en una situación casi desesperante. Pero a pesar de las presiones y la grave situación, la comunidad está decidida a no abandonar su territorio ancestral, al igual que otras comunidades que están pasando por la misma situación, como la Lonko Puran o la de Paynemil.

Después nos dirigimos hacia el sur, hacia Bariloche. El recorrido es impresionante a nivel de naturaleza, pero por donde se mira hay alambrados que delimitan la "Mapu" en propiedades privadas. Al llegar a la ciudad, las contradicciones están servidas. Por una parte, la ciudad turística preparada para una élite nacional y/o extranjera con edificios en madera al puro estilo alemán, aparadores llenos de ropa de moda gringas o europea y precios sólo para los pudientes. Al otro lado, o mejor dicho en los barrios altos, lxs obrerxs y empleadxs explotadxs que necesita esa ciudad artificial a la ribera del lago Nahuel Huapi.

La mayoría de lxs Mapuche de Bariloche, pobladores originarixs de los lagos, ahora están relegados a vivir en los barrios más empobrecidos, en muchos casos en situación de hacinamiento, donde evidentemente se repiten conflictos sociales y la violencia estructural (la del Estado y el Sistema) es aplastante. A pesar de todo ello, en éstos barrios es donde hemos encontrado el mayor calor humano, compañerismo y sobretodo compromiso. Hemos tenido la gran suerte de compartir con gente dispuesta a lo que sea para recuperar la dignidad Mapuche y sobretodo librerar a la "mapu". Aprendimos mucho en las noches que pasaban a ser mañanas hablando sobre el pasado y la cosmovisión Mapuche, así como de las ganas que hay de retomar los valores de los abuelos para poder vivir un futuro más digno para sus hijxs.

De Bariloche se nos abrió la posibilidad de llegar a la recuperación del predio de Santa Rosa-Leleque. Llegamos en la noche, pero se nos abrieron las puertas y ya cerca del fuego se nos ofreció un plato de sopa caliente. El calor humano que había dentro del habitáculo contrastaba con el frío patagónico que corría fuera.

El predio de Santa Rosa-Leleque comprende una recuperación de tierras de algo más de 500 hectáreas llevada a cabo por la familia de Atilio Curiñanco y Rosa Nahuelquir. Territorio Ancestral Mapuche y donde vivían los abuelos de Atilio, actualmente está dentro de lo que el Estado argentino ha ido vendiendo a Benetton.

La multinacional Benetton, tras su fachada comercial de tolerancia y multiculturalidad, esconde las más ruín táctica de especulación económica. A partir de los años 90 empezó a comprar miles de hectáreas a precios irrisorios y sin tener en cuenta para nada a los Pueblos Originarios. El vendedor fue en la gran mayoría de casos el Estado argentino. En el momento actual, sólo Benetton tiene más de un millón y medio de hectáreas desde el norte de Argentina a la Patagonia , excluyendo y marginando así a lxs pobladores de esas tierras. Al igual que Benetton, grandes extensiones de tierra están siendo adquiridas por grandes capitales, como Thompson o Sylvester Stallone.

En el año 2002, Atilio, Rosa y su familia, tomaron la valiente decisión de recuperar el territorio al que pertenecían. Acompañados por otras personas, consiguieron entrar al lugar y establecerse. En dos meses llegó la orden de desalojo de forma sorpresiva por orden del juez de la ciudad de Esquel (Chubut) Oscar Colabelli. Sin ningún aviso desde la ciudad del Maiten llegó la policía con algunos perros quienes se encargaron de expulsar a la gente, desarmaron la casa y en un camión se llevaron animales, herramientas, etc, destrozando los cultivos.

El llamado de la Tierra era más fuerte que el miedo y durante éste año en el mes de Febrero se volvió a recuperar el predio. El conflicto de una familia Mapuche contra el Imperio Benetton está en plena actualidad, y si bien podría parecer una lucha desigual, la razón de pertenencia a la "mapu" es muy superior a la propiedad privada de la tierra. Mucho antes de la recuperación después de un juicio contra los Mapuche donde la justicia winka benefició a la multinacional reconociendo la propiedad privada y a la vez absolviendo a los Mapuche de la acusación de usurpación, Atilio y Rosa, tuvieron una reunión con el propio Benetton en Roma, con Pérez Esquivel de mediador, donde no se llegó a casi nada, ya que Benetton pensaba que todo se puede resolver con plata.

Llevan casi medio año en el lugar que pertenecen, acompañados por otrxs Mapuche y otra gente no Mapuche que dan apoyo a la causa. En éste periodo se han hecho Gellipun (ceremonias espirituales), se está construyendo una ruca (casa comunal), se trabaja la tierra con respeto y hay algunos animales. Los valores de respeto y convivencia con la Mapu es lo primero y es quizás lo que les ha dado fuerzas para aguantar el duro invierno patagónico, sin tener en un inicio ni cuatro paredes y con la prohibición directa de Benetton de hacer fuego.

Pasamos algunas noches hablando al lado del fuego y comprendimos con la palabra y la acción, la importancia de liberar la Mapu. El equilibrio está roto, cada vez se agrede más y más al medio, son muy pocxs en el mundo lxs que se enfrentan realmente a eso. Mientras los estados actuales continúan vendiendo todo a capitalistas o multinacionales que atacan frontalmente al equilibrio de la vida, éstos días hemos compartido con gente que lucha por liberar la Mapu que es luchar por el futuro de las generaciones venideras.

Con "la gente de la Tierra "
Salut i Resistència
M i M

Recomendamos visitar:

http://www.santarosarecuperada.com.ar/

http://www.debtwatch.org/documents/enprofunditat/Transnacionals_espanyoles/Dossier_Repsol_28032006.pdf

Pueblo Mapuche